La carrera diplomática
Ban Ki-Moon nació el 13 de julio de 1944, estudió relaciones internacionales en la Universidad Nacional de Seúl y obtuvo una maestría en administración pública de la Universidad de Harvard.
La ONU es un gigantesco organismo burocrático. Luego regresó a Seúl, donde dirigió el Departamento de Organismos Internacionales de la Cancillería.
Posteriormente fue nombrado embajador ante Estados Unidos en dos ocasiones, con una breve interrupción entre 1990 y 1992, tiempo en el cual integró la Comisión de Control Nuclear de las dos Coreas.
Allí logró, como vicepresidente, que se adoptara la Declaración Conjunta de Desnuclearización de la península.
En 1999, fue elegido presidente de la Comisión Preparatoria del Centro de Datos del Tratado para la Prohibición de Pruebas Nucleares. De 2001 a 2003 fue embajador de Corea del Sur ante la ONU, y al año siguiente fue nombrado canciller por el presidente Roh Moo-hyun.
¿Qué ONU recibe Ban Ki-moon?
Ban Ki-Moon, con 36 años de servicio exterior a sus espaldas, es uno de los ministros más estables en la historia de su país, habiendo superado varios episodios críticos con su vecino, Corea del Norte.
Precisamente, antes de las pruebas nucleares norcoreanas, Ban Ki-moon había dicho que planeaba cambiar la estrategia de su antecesor y ser más agresivo en su intención de persuadir a Corea del Norte a abandonar su programa nuclear.
Incluso, como canciller surcoreano, se mostró dispuesto a entablar relaciones diplomáticas directas con ese país. Ban Ki-moon recibe de Annan una organización en plena fase de reforma. Ban Ki-Moon recibe de Kofi Annan unas Naciones Unidas en pleno proceso de reforma, duramente criticada por las denuncias de corrupción en el programa de Petróleo por Alimentos con Irak, las acusaciones sobre abuso sexual en algunas misiones de paz y la falta de transparencia en los manejos financieros de la entidad.
Las Naciones Unidas es a la vez un gigantesco organismo burocrático: un presupuesto anual de US$5.000 millones, más de 90.000 hombres en misiones de paz desplegadas en diferentes regiones del planeta y oficinas prácticamente en todos los países del mundo.
En su manejo eficiente y dinámico, tendrá Ban Ki-Moon uno de los más grandes retos. A pesar de ser un experto negociador, algunos le critican a Ban Ki-moon su personalidad pasiva y cuestionan si tendrá la fuerza necesaria para llevar a cabo los cambios necesarios en las Naciones Unidas. Sin embargo, la percepción que prevalece acerca del canciller surcoreano es la de un hombre reconocido por sus credenciales diplomáticas y un gran conciliador; un internacionalista de bajo perfil pero efectivo a la hora de generar consensos.
Casado con Yoo Soon-Taek, Ban es padre de dos hijas y un hijo. Habla inglés y francés.
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